El multitasking es la capacidad de realizar múltiples tareas simultáneamente. Se aplica a todos los ámbitos de la vida: trabajo, estudios, ocio…
¿Quieres comprobar si tú también tienes esta capacidad? Te animo a que realices el siguiente test del multitasker.
Suma un punto por cada una de las siguientes afirmaciones con las cuales te sientas identificado:
Si has sacado 0, 1 o 2 puntos, enhorabuena, aún no eres multitasker.
Si has sacado 3 puntos o más, lo siento, eres un multitasker de manual.
Todos sabemos que en la sociedad actual, se valora mucho el multitasking pero, ¿Crees que realizar varias tareas a la vez es realmente efectivo?
¿Es realmente una habilidad? ¿Se trata de un término inventado para romantizar la explotación? ¿O es simplemente un mito moderno?
Lo cierto es que la ciencia dice que el cerebro humano tiene limitaciones en cuanto a la atención y el procesamiento de información. Somos capaces de alternar rápidamente entre diferentes tareas, pero no podemos concentrarnos en varias cosas al mismo tiempo de manera eficiente.
Estudios científicos han demostrado que cuando intentamos realizar múltiples tareas simultáneamente, en realidad estamos alternando rápidamente nuestra atención entre ellas. Y esta constante división de nuestra atención nos puede llevar a que cometamos errores, que tardemos más tiempo en realizar las tareas y que estemos mucho más estresados.
En definitiva, que seamos mucho menos productivos y eficientes.
Así que os propongo un reto. Busca la efectividad centrándote en una única tarea y verás cómo maximizas tu nivel de calidad y de productividad.
Multitasking no es sinónimo de productividad.
La clave no es la cantidad de tareas que realicemos simultáneamente, sino la calidad y la dedicación que ponemos en cada una de ellas.
El que mucho abarca poco aprieta 😬